El Alcaraván común es un ave esteparia bastante extendida en España, pero que no resulta fácil de observar debido a sus colores discretos y a sus hábitos esquivos y nocturnos.
Es una pequeña zancuda de grandes ojos amarillos y coloración general pardo-terrosa. El adulto luce una banda blanca bordeada de negro en el ala, y dos franjas blancas por encima y debajo del ojo. Tiene el pico amarillo, con la punta negra.
Durante la primavera y el verano, la especie se hace notar mucho a través de su característico reclamo, un cur-li-liii inconfundible que se oye en horas crepusculares y nocturnas.
En la Península ocupa ampliamente las zonas de influencia mediterránea, evitando regiones montañosas y forestales, por lo que podremos verla, si vamos bien atentos, por nuestros extensos campos agrícolas.
Ocupa terrenos llanos o ligeramente ondulados, con escaso arbolado y vegetación baja, muchas veces áridos o semiáridos. Puede aparecer en pastizales secos, eriales, estepas y semidesiertos, o bien en ambientes agrícolas de secano e incluso regadío. En zonas agrícolas prefiere las áreas de vegetación natural frente a las cultivadas.
Se alimentan fundamentalmente de insectos, como ortópteros, coleópteros u hormigas.
Su evolución poblacional se conoce muy poco, aunque se presume un descenso superior al 20% en las décadas de los setenta y ochenta, con importantes declives en la Comunidad Valenciana, Huesca y Almería.
Y terminamos con un conejito que vimos esa misma tarde.(Fuente @seo_birdlife - Fotos de agosto)
